El gato comienza a brillar como mascota cuano el hombre cambió su hábitat, pasó de la casa abierta con patio o jardín al departamento totalmente cerrado. Este cambio arquitectónico encontró en el gato una mascota de fácil adapatación al nuevo habitáculo humano. El elemento clave ha sido la bandeja sanitaria. Este simple accesorio es el que ha posicionado al gato como mascota de la posmodernidad, ya que su utilización ha solucionado uno de los principales problemas de la convivencia con un animal de compañía: sus eliminaciones.
Además de constituir un elemento fundamental para la adaptación del gato a la vida doméstica, la bandeja sanitaria tiene una gran importancia en otros aspectos, como el sanitario. Por ejemplo, desde el punto de vista preventivo por evitar la diseminación de parásitos intestinales.
Las bandejas sanitarias pueden ser permanentes o desechables. Lo más importante es que si son permanentes sean de fácil limpieza.
Hay modelos que tienen paredes altas e incluso techo, como una jaula de viaje. Estas bandejas cubiertas son desmontables para su limpieza y son beneficiosas para casas con varios gatos.
En cuanto al lugar más adecuado para colocarla dentro de la casa, la bandeja debe estar en un lugar tranquilo y de fácil acceso para el gato.
El gato que vive en casa es un animal sociable. Este gato socializado permite en la mayoría de los casos una buena revisión clínica sin necesidad de utilizar métodos coercitivos, además los propietarios podrán darle la medicación indicada por el veterinario sin inconvenientes.
Estos felinos caseros tienen otra característica interesante, y es que viven más tiempo.
Los gatos de vida libre o semilibre, en cambio, están expuestos a adquirir enfermedades infectocontagiosas. En definitiva, los gatos de la calle viven poco tiempo y casi no visitan al veterinario.
Po lo tanto, lo que se recomienda es tratar de tener un ambiente enriquecido para el gato, o sea, tener elementos que hagan confortable su vida y que le permitan descargar tensiones, rascadores, juguetes, etc.
El segundo punto de importancia es que al convivir juntos, el gato y su familia crean un fuerte vínculo afectivo.
Fuente: Revista animalia
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