Los perros, así como los seres humanos, tenemos una etapa en nuestra niñez en el que mordemos todo tipo de cosas para aliviar el dolor que sufrimos a causa de la salida de los dientes. La diferencia en la edad adulta, es que los perros siguen teniendo por costumbre morder todo tipo de objetos que tengan a su alcance. Esta conducta, la desarrollan por motivos de ansiedad, aburrimiento o hiperactividad. Muchos de ellos lo hacen porque necesitan desahogarse y liberar energía que no gastado durante el día. Debemos, por tanto, enseñarles que deben morder únicamente objetos destinados para ese uso, y dejen a un lado tus pertenencias u objectos de valor.
Para que este ataque de objetos personales no se produzca, los expertos recomiendan que el animal haga mucho ejercicio para que se canse y se relaje, y no sienta esa necesidad de desahogarse cuando llega a casa. Tendremos que proporcionarle juguetes especiales que pueda masticar, y premiarlo luego cuando lo haga, para que entienda que son esos objetos los que sí debe morder.
Si a pesar de todo el perro termina mordiendo objetos que no debe, tendremos que estar vigilando para reprenderle justo en el momento en el que se lance a por algo. Si lo encontramos mordisqueando tendremos que decirle un fuerte NO para que entienda que eso no está bien, y apartarlo del sitio dándole un juguete. Lo más importante es ser constantes y pacientes.
Si además de eso y de haberle dado un paseo agotador sigue queriendo morder nuestras cosas, debemos considerar si nuestro perro padece algún tipo de ansiedad o patología más grave. Los animales más longevos pueden sufrir el denominado Síndrome de Disfunción Cognitiva, que afecta a su capacidad de aprendizaje y su memoria. En el caso de apreciar que el problema de mordida persiste, lo mejor es que acudamos al veterinario.
Comentarios recientes