Los parásitos externos son aquellos que se sitúan sobre la piel del animal, y los más comunes son las pulgas, garrapatas y los mosquitos. El control de estos parásitos externos es fundamental para la salud de nuestro perro y también para la salud de las personas que conviven con él.
Esto es importante porque muchos parásitos externos producen enfermedades que pueden transmitirse al hombre, principalmente a los niños y personas mayores. Estas enfermedades son las zoonosis.
Por ello, la desparasitación externa de nuestro animal es muy importante y se inicia en el momento de su llegada a casa, cuando nuestro veterinario nos marcará una pauta adecuada para su control, por ejemplo, el producto a usar y frecuencia de uso.
Garrapatas
Son parásitos externos que se alimentan de sangre y ponen los huevos en la arena, grietas de las paredes o el suelo. Hasta su completo desarrollo pasan por distintas fases y para evolucionar de una fase a otra deben alimentarse, en ese proceso pueden transmitir enfermedades.
Las larvas trepan por la hierba y se adhieren al animal con las uñas. Se fijan con la mandíbula e ingieren sangre. No sólo producen heridas por picadura sino que además transmiten enfermedades.
Para controlarlas, es tan importante prevenir y eliminar la infestación como evitar que puedan transmitir enfermedades. Uno de los principales métodos de control debe ser la prevención, no obstante, si llegan hasta él, es muy importante la retirada rápida de las garrapatas, para evitar al menos que puedan transmitir enfermedades.
Pulgas
Las pulgas son insectos sin alas con el cuerpo aplanado lateralmente. Depositan sus huevos en el pelo del animal, pero luego caen donde el animal frecuenta, en cualquier lugar donde duermen los animales.
La confirmación de las pulgas se realiza cuando las vemos, pero también se sospecha su presencia porque se visualizan heces de pulga, unos restos negros o marrones en la base del pelo.
Las pulgas producen picor y molestias, por lo que los perros se rascan y se muerden todo el cuerpo. Los perros con alergia a las pulgas desarrollan dermatits alérgica por picadura de pulga y la reacción a la picadura depende de la sensibilización del animal a la saliva del insecto.
Además, transmiten muchas enfermedades al hombre y en el perro son vectores intermediarios de una tenia llamada Dipylidium caninum, que llega al perro cuando este ingiere las pulgas infestadas al morderse por el picor.
Mosquitos
Las dos enfermedades más conocidas y debidas a la acción transmisora de los mosquitos sobre nuestros perros son la leishmaniosis y la filariosis. En ambos casos, las patologías afectan al animal gracias a la picadura de un mosquito. De ahí la importancia de un método preventivo que impida su picadura.
PREVENCIÓN DE LOS PARÁSITOS EXTERNOS
Hay que consultar al veterinario o tienda especializada (Petirrojo) cuál es el mejor protocolo de tratamiento. Existe una amplia gama de productos, pero hay que seleccionar uno, o varios, según la edad del animal, la raza o el tipo de pelo, el tamaño y el hábitat.
En el caso de los mosquitos existen fármacos de demostrada acción repelente contras las hembras de flebotomo y sus picaduras, pero también tenemos a nuestro alcance mallas antimosquitos y la posibilidad de restringir los paseos en épocas de alto riesgo.
Por último, ahora, además, contamos con una vacuna contra la leishmaniosis, muy recomendable en razas de tamaño grande, para razas de tamaño pequeño existe un jarabe muy indicado para ellos.
Fuente: Revista Royal Canin Marzo 2013.
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