En el post de hoy trataremos un artículo muy interesante sobre que pasos debemos seguir para favorecer la integración de un segundo gato.
Dicho artículo está desarrollado en la revista mensual «El Gato En Casa» (podéis recibir el ejemplar de Marzo, comprando cualquier accesorio de gato en nuestra tienda) pero le ofrecemos un breve resumen.
Si bien es cierto que un felino adulto tiene sus costumbres y rutinas bien definidas es posible incorporar un segundo gato minimizando los riesgos de rechazo. En la mayoría de casos, una vez adaptados, la incoproración de un segundo gatito, en crecimiento, aportará muchos beneficios al gato más mayor.
Un gato joven, querrá jugar con el gato mayor, le perseguirá, le provocará y esto puede provocar varios efectos en nuestro gato adulto. Desde bufidos, manotazos y en contadas ocasiones, agresiones que deberemos frenar de inmediato. En todo caso, una vez adaptados, estos juegos incentivarán a que nuestro gato adulto realice más ejercicio.
Seguidamente les mostramos el proceso que se debe seguir para minimizar el impacto:
- Primero debemos asegurarnos, con un chequeo veterinario, que la nueva incorporación se encuentra en perfecto estado de salud.
- Un error muy común es querer que hagan «amigos» desde el primer día, cuando esto es realmente complicado por no decir imposible. El mero hecho de presentar un olor diferente causará rechazo en él. De hecho, si teneis dos gatos (ya integrados), podréis comprobar que el mero hecho de llevar a la peluquería a uno de ellos y «quitarle» su olor provocará el mismo rechazo que si fuera un desconocido.
- Para evitar el anterior punto, es importante habilizar una zona (con todo el material necesario: bebedero,comedero, bandeja, rascador...) y separarla de nuestro gato adulto. De esta forma se irán acostumbrando al olor sin interactuar directamente.
- Para mejorar la transferencia de olores, deberemos frotar un pañuelo limpio por el hocico y entre los dedos de ambos gatos y posteriormente, frotar dicho pañuelo en los juguetes, rascadores o zonas en las que transite nuestros respectivos gatos.
- Una vez realaizado estos pasos, y transcurridos unos dias, podemos intentar el primer contacto visual. Actuaciones como bufidos o manotazos de «aviso» son normales pero actuaremos directamente en caso de producirse agresión. La mejor forma de actuar es con un spray de agua, ya que evitaremos alzar la voz y utilizar la fuerza.
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